Flora en la Patagonia

La Patagonia es una de las regiones de la Argentina que goza del más bello paisaje, decorado por nevados picos montañosos, inmensos glaciares y la más colorida vegetación. En algunas partes la flora es más abundante y variada, en otra más escasa, pero siempre está presente aportando tonalidades y colores diferentes.

La amplia variedad de flora que se puede observar en la Patagonia, responde a las diferentes condiciones climáticas que se dan en dos sectores o sub-regiones: la estepa y el bosque andino. La diferencia crucial entre estas zonas es el registro de precipitaciones (lo que indudablemente repercute en el desarrollo vegetativo). Hacia los Andes las lluvias son más frecuentes, lo que favorece la proliferación de árboles, arbustos y plantas que componen el bosque. Hacia el sector de estepa patagónica, los registros en cambio, están por debajo de los 300 milímetros anuales. Este escaso nivel de lluvias dificulta el desarrollo de la flora, lo que genera que sólo persistan algunas especies adaptadas a este árido y seco clima.

 

A pesar de estas diferencias, la flora autóctona de la región patagónica es bastante amplia y se ha expandido aún más por la implantación de especies traídas desde otros puntos de la Argentina. Ello ha llevado a que se conformen verdaderas comunidades vegetales en donde coexisten las más variadas especies sobre el territorio sureño. Entre los árboles nativos, se encuentran los Alerces, verdes ejemplares capaces de alcanzar una altura superior a los 20 metros. Son muy comunes en la Patagonia. En la provincia de Chubut, el Parque Nacional Los Alerces ha sido declarado Patrimonio Natural, por lo que goza de una protección privilegiada. Junto a estos, se levantan los Arrayanes, altos ejemplares (entre 8 y 10 metros) de rojiza corteza y verdes hojas que proliferan a orillas de los lagos. Se pueden identificar también algunos Cipreses de la Cordillera, unas coníferas de copa alargada, muy común en la zona del Bolsón. Otro de los ejemplares muy conocidos en la Patagonia es el Pehuén o Araucaria, una conífera cuyas ramas se abren en forma de paraguas. De corteza grisácea, este árbol era considerado sagrado por la comunidad mapuche. El Maitén es otra de las especies autóctonas del sur de la Argentina. Es un árbol de copa redonda con ramas que tienden a inclinarse hacia abajo (por lo que se lo suele confundir con el sauce llorón). Muchos ejemplares más, como el Canelo, el Coihué, el Lenga, el Ñire, el Álamo y el Roble, entre otros, proliferan en esta región.

 

Una gran variedad de arbustos y semi-arbustos, invaden cada rincón patagónico. El más reconocido, por el cuál se bautizo así a la ciudad, es el Calafate. Este arbusto, de aproximadamente metro y medio de altura, posee hojas de color verde oscuro, flores amarillas y frutos redondeados de colores azules y violáceos. Este fruto es utilizado para producir dulces, preparados en almíbar, entre otros. Otro ejemplar muy famoso de la Patagonia es la Reina Mora, un arbusto de flores rosáceas con muchos pétalos, cuyo fruto posee forma de panadero plumoso. De similares características es la Mutisia Reina. La principal diferencia con la reina mora, es la flor, anaranjada con forma de estrella. Una de las flores características de esta región es la del Amancay. Este arbusto, capaz de alcanzar un metro de altura, es conocido por sus hermosas flores amarillas y anaranjadas con pétalos teñidos de finas estrías rojas. Muy común en los bosques húmedos, posee hojas verde claro de forma lanceolada. Los mismos colores posee la flor de la famosa Orquídea patagónica, cuyas hojas verde claro se amontonan en forma de roseta.

 

Estos son algunos de los ejemplares vegetales que completan con intensos y variados colores la belleza del paisaje patagónico en ciudades como Calafate. Para admirar y retratar en una postal fotográfica.

Como llegar al Chalten desde San Martin de los Andes

Para llegar desde San Martin de los Andes al visitado Chalten hay dos circuitos posibles. El primero, más preferido por los turistas por los hermosos paisajes que atraviesa durante el recorrido, es comenzando por la Ruta Nacional N° 234 hacia el sur. Saliendo desde San Martin de los Andes, se toma esta ruta, famosa por integrar el atractivo Camino de Los Siete Lagos, que recorre gran parte de la región patagónica por el sector oeste. En el primer tramo de este increíble camino la Ruta N° 234 rodea las turquesas aguas del Lago Lácar. A aproximadamente 15 kilómetros de este maravilloso espejo natural, se encontrará el desvío que lleva hacía el Centro de Ski de Chapelco.

Se deberá seguir en dirección hacia el sur, hasta pasar el punto conocido como Las Taguas, en donde encontrará el puente que cruza el Río Hermoso y luego un cruce. Allí se abrirán dos caminos; uno que lleva hacia Bariloche (el de la izquierda) y otro que continua por el Camino de los Siete Lagos. Se deberá seguir en dicha dirección, atravesar la Laguna Fría y luego el otro lago de este pintoresco recorrido, el Machónico. Unos kilómetros más adelante encontrará otro desvío que lleva hacia la Laguna Pudú-Pucú y al Lago Hermoso, que se encuentra escondido unos 4 km hacia el bosque.

Para quienes disfruten de las vistas naturales, y dispongan de tiempo, es un paisaje increíble para conocer. Pero el recorrido debe continuar, por lo que se reanudará el viaje por la misma Ruta N° 234. En el kilómetro 43 quienes conduzcan a baja velocidad podrán admirar la asombrosa cascada de Vuliñaco (una caída natural de casi 40 metros). Pasando esta bella postal el recorrido llevará, al cabo de un tramo, al Lago Falkner, rodeado por el impresionante Cerro Buque (famoso por sus torres de piedra en la cima). Hacia la derecha aparece otro gran espejo de agua, el Lago Villarino.

Pasando estos increíbles y turquesas lagos el viaje continua por camino de ripio, unos 3 kilómetros después se podrá vislumbrar por entre la tupida y verde vegetación al conocido Lago Escondido. Atravesando este bello paisaje, se encontrará luego de varios kilómetros con un desvío por la Ruta Provincial N° 65 que lleva hacia el Lago Traful. Continuando el recorrido por la Ruta N° 234, el pintoresco paisaje anuncia que se está próximo a otro gran espejo de agua; el Lago Correntoso. La ruta rodea las azules aguas del Lago por lo que se puede disfrutar de una privilegiada vista del mismo. Este mismo lago volverá a cruzarse en cercanías de Villa La Angostura. Un tramo más adelante se podrá visualizar el desvío que lleva hacia el Lago Espejo, luego de dos kilómetros se encontrará el mirador para apreciar la bella postal que ofrece el Lago como un auténtico espejo del celeste cielo.

Continuando el recorrido aparecerá un brazo del Lago Espejo. Una vez rodeado esta gran represa natural, se reanuda el viaje llegando casi a los 100 kilómetros recorridos desde San Martin de los Andes. En este punto del trayecto se encontrará el cruce con la Ruta Nacional N° 231 que lleva hacia el Paso Internacional Cardenal Samoré. Por esta ruta se debe seguir el circuito. Luego de unos kilómetros podrá visualizarse el brazo Ultima Esperanza del reconocido Lago Nahuel Huapi. Afortunadamente la ruta continúa en forma paralela al Lago, por lo cuál podrá disfrutarse de un increíble paisaje durante el último tramo del Circuito de los Siete Lagos hasta llegar a la localidad de Villa La Angostura en donde finaliza el pintoresco camino.

 Para continuar hacia El Chalten se deberá conitnuar por la Ruta Nacional N°231 hasta empalmar con la Ruta Nacional N° 40 en la bella ciudad de Bariloche. Desde allí, el viaje prosigue en sentido sur, atravesando los lagos Gutierrez, Mascardi, Guillermo, pasando luego de varios kilómetros por El Bolsón. Ingresando a territorio de Chubut, la ruta llevará hacia las localidades de Esquel, Tecka, Gobernador Costa y Río Mayo, entre otras, para finalmente pisar suelo santacruceño. Desde allí, el camino de la Ruta N° 40 llevará a la comunidad de Perito Moreno y luego de varios kilómetros al empalme con la Ruta Provincial N° 23 que lleva al Chalten.

Quienes deseen evitar el camino de los Siete Lagos podrán optar por la otra alternativa. Saliendo desde San Martin de los Andes, deberán tomar la Ruta Nacional N° 234 hacia Junín de los Andes, desde allí deberán continuar por la misma hasta empalmar la Ruta Nacional N° 40 y por esta realizar todo el recorrido hasta encontrar la ruta N° 23 que llevará hacía el Chalten.

Eventos destacados de la Patagonia

En la Patagonia, cada provincia, cada ciudad, posee sus propias celebraciones y festejos particulares. Muchas de estas fiestas populares tienen que ver con la cultura y la naturaleza que rodea a estas localidades. El Bolsón por ejemplo celebra la Fiesta del lúpulo (materia prima con que elaboran la cerveza artesanal), en Puerto Madryn la Fiesta Nacional del Cordero, en Río Turbio, la Fiesta Nacional del Carbón, entre otras. Sin embargo algunas de esas celebraciones adquieren relevancia y conocimiento a nivel nacional e internacional. Entre esos eventos, se destaca la Fiesta del Lago Argentino, celebrada en la ciudad de Calafate, provincia de Santa Cruz. Se realiza durante el mes de Febrero y se conmemora el bautismo del Lago Argentino con una serie de actividades culturales, deportivas y sociales. Demostraciones de patín sobre hielo (en la congelada Bahía Redonda), festival de doma y jineteada, puestos de comida regional, y shows musicales son algunas de las propuestas que hay durante esta celebración.

 

A partir del mes de Mayo, comienzos de Junio, en las diversas localidades sureñas se da comienzo a la Temporada de invierno con eventos y actividades culturales y deportivas. Bariloche por ejemplo, inaugura el período invernal con la celebración de la Fiesta Nacional de la Nieve. En la provincia de Neuquén, por ejemplo se inicia con las demostraciones y exhibiciones en centros como Chapelco, Bayo y Caviahué. En Chubut se promueve el turismo en invierno en su región cordillerana tanto como en el sector costero en la propuesta denominada “nieve-ballenas”. En Calafate durante esta fecha se celebra la Fiesta del Hielo, una verdadera fiesta montada en torno al hielo. Deportes sobre hielo, demostraciones artísticas, esculturas sobre hielo, desfiles y shows de antorchas son algunas de las actividades que incluye esta celebración. Se realiza además la competencia de muñecos de nieve y la tradicional elección de la “reina del hielo”. Bariloche, además, rinde culto a la diversidad cultural en la Fiesta Provincial de las Colectividades, una propuesta de intercambio y difusión de las comidas, costumbres y producciones de las diversas colectividades que habitan en la región. Representantes de las culturas realizan bailes típicos, además de presentar platos, vestimentas y artículos propios de dicha colectividad.

 

Durante el mes de Septiembre, Esquel se prepara para recibir a turistas y montañistas de todo el país que llegan para participar de la Fiesta Nacional del Esquí. Se realiza en el centro de esquí La hoya, ubicado a 13 kilómetros de la localidad. Allí, reconocidos deportistas se dan cita para protagonizar demostraciones, pruebas de esquí y participan del “tetratlón de la Hoya”, una competencia de varias disciplinas sobre este centro turístico. Estas intensas jornadas deportivas son coronadas por la noche con increíbles shows musicales y desfiles de antorchas desde la cumbre del centro.

 

El calendario patagónico incluye numerosas celebraciones más. Las aquí nombradas son las más reconocidas a nivel nacional e internacional por su prestigio y por la gran convocatoria que suponen. Son fiestas populares, verdaderas muestras de la cultura y de la naturaleza de la Patagonia Argentina.

Clima en la Patagonia

La Patagonia argentina es una de las regiones sureñas más conocidas a nivel mundial. Sus paisajes, sus deliciosos platos, su cultura y su clima, principalmente sus nevadas durante el invierno, la vuelven uno de los destinos internacionales más elegidos por los turistas.

 

Por su ubicación bien al sur del territorio americano, la región patagónica posee un clima semiárido, con tintes desérticos. Es una zona de extrema sequía, los registros anuales de precipitaciones rondan los 300 milímetros. Hacia el norte de la región (provincias de Neuquén, Río Negro) se observa un clima un poco más templado durante el año, con temperaturas más moderadas (principalmente durante los meses de primavera y otoño), mientras que en el sector sur de la Patagonia (provincias de Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego), el clima se vuelve sub-ártico (con fuertes vientos y bajas temperaturas). Esta zona goza de una mayor humedad y de mayores registros de nevadas.

 

El clima de esta región se caracteriza por fuertes vientos que provienen del suroeste, del Pacífico. Muchas de esas masas de aire, cargadas de mucha humedad, descargan sus precipitaciones al otro lado de la Cordillera de los Andes. Lo que genera que los vientos polares “lleguen” secos hacia el sector patagónico. Las temperaturas medias anuales rondan los 10° centígrados, las marcas indican que se producen grandes variaciones térmicas entre el día y la noche. La amplitud térmica se manifiesta también entre los períodos estacionales de verano e invierno. Durante los meses de Junio, Julio y Agosto las temperaturas no superan los 4°C y suelen registrarse marcas de varios grados por debajo de los 0°centígrados. En las ciudades más australes de la Patagonia, la jornada diurna es breve, ya que cuentan con pocas horas de luz, y suelen ser azotados por intensas tormentas de nieve. En el verano en cambio, predominan los días despejados, con la presencia de un sol radiante. Las temperaturas suelen elevarse, en los mejores días pueden disfrutarse marcas de alrededor de 13°C. A pesar de ello es importante recordar que las condiciones climáticas en el sur, son muy cambiantes; soleados días pueden transformarse en jornadas lluviosas, las ciudades pueden invadirse de un tono gris plomizo en sólo cuestión de minutos. Del mismo modo, pueden irrumpir intensas nevadas, cambiando por completo el panorama de un día.

 

El carácter cambiante de las condiciones climáticas y las bajas temperaturas que caracterizan a la región patagónica, obligan a los turistas a ser precavidos y a consultar con guías a la hora de planificar las vacaciones allí. Los consejos principales son; llevar ropa de abrigo (camisetas y remeras térmicas, buzos polares y camperas de abrigo) y los accesorios básicos a la hora de visitar un paraje de estas características (bufanda, gorro, guantes, varios pares de medias y un paraguas). Por supuesto se recomienda contar con prendas impermeables o rompeviento y con calzado cómodo e impermeable que permita estar preparado en caso de tener que realizar caminatas bajo lluvias o nevadas repentinas.

 

Estos aspectos se deben tener en cuenta a la hora de planificar un viaje o elegir una excursión, porque las condiciones climáticas en la Patagonia no dan tregua.

La impresionante excursión Todo Glaciares

Durante todo el año, la localidad de Calafate es asediada por turistas que llegan desde todas partes del mundo para familiarizarse con la cultura, deleitarse con sus exquisitos platos, y principalmente conocer los famosos glaciares. Si bien a nivel internacional ha alcanzado mayor renombre el Glaciar Perito Moreno, en proximidades de la ciudad, se encuentra el Parque Nacional Los Glaciares, conformado por alrededor de 47 glaciares más.

 

Las agencias de turismo de Calafate ofrecen numerosas excursiones a los magníficos bloques de hielo. Aventuras de navegación alrededores de los glaciares, caminatas sobre la superficie congelada de los mismos, safaris náuticos en proximidades del Perito Moreno, son algunas de las más elegidas por los turistas. Pero hay otra excursión que combina los atractivos de muchos de los tours de hielo. La travesía conocida como todo glaciares es una propuesta de conocimiento de los glaciares en una aventura por las heladas aguas del Lago Argentino. Se trata de una excursión de día completo en donde se navegará alrededor de los Glaciares más reconocidos del Parque Nacional.

 

La aventura se da comienzo en el Puerto Punta Bandera, ubicado a aproximadamente 50 kilómetros de la localidad de Calafate. Allí, un catamarán recibe a los turistas que arriban desde sus respectivos hoteles. Una vez reunido el grupo, se aborda la embarcación y comienza la aventura. Durante la primera fase de la navegación se rodea uno de los puntos más angostos de todo el recorrido, conocido como Boca del Diablo, para luego continuar por el Brazo Norte del Lago Argentino. En el trayecto por dicho canal se invita a los pasajeros a advertir las curiosas formas y colores que pueden apreciarse a medida que se aproxima al glaciar. Se toma el Canal Upsala y por allí continúa la navegación, rodeada de témpanos que se desprenden de los gigantescos bloques de hielo. La embarcación se dirige hacia el Glaciar Upsala y se acerca todo lo posible, siempre y cuando la barrera de témpanos no sea tan grande. De todos modos la ubicación del catamarán permite disfrutar de una privilegiada vista panorámica de la increíble masa de hielo. Durante algunos minutos se detiene el recorrido para que los pasajeros puedan apreciar el bello paisaje en que están inmersos y puedan fotografiarlo. Al cabo de un breve período continúa la aventura navegando hacia el Canal Spegazzini, desde el cuál se podrá observar el Glaciar Seco. Transitados varios kilómetros finalmente la embarcación se aproxima al gigante Glaciar Spegazzini, uno de los más altos de todo el Parque. Nuevamente se convoca a los pasajeros a subir a cubierta y admirar el tamaño y la belleza del Glaciar. Se retoma el viaje, regresando por el mismo Brazo Norte del Lago, hasta llegar al cruce del Canal de los Témpanos. Allí, la embarcación se desvía para dirigirse al mítico y reconocido Glaciar Perito Moreno. La navegación continúa hasta aproximarse a la pared de ruptura del glaciar, frente a la cuál el catamarán se detiene para que los turistas puedan apreciarlo. El punto más esperado de todo el recorrido, el Perito Moreno es objeto de gran admiración de los pasajeros que no pueden dejar de fotografiarlo y sorprenderse por sus increíbles dimensiones. Finalizado un período de tiempo, se emprende el regreso por el Canal de los Témpanos hasta retomar el circuito y finalmente arribar a Puerto Punta Bandera.

 

"Todo Glaciares" es la excursión ideal para quienes deseen conocer estos gigantes de hielo. La aventura permite introducirse en el frío predio del parque, apreciando los glaciares más reconocidos, algo que no todas las travesías permiten realizar (al concentrarse en uno u otro).