En Calafate, al igual que en muchas localidades de la región cordillerana de la Patagonia argentina, se puede practicar arquería. En el predio de Cerro Bayo, en Neuquén se encuentra uno de los polígonos más conocidos del sur argentino, en donde se puede poner en práctica esta milenaria técnica.
Los frondosos bosques de la Patagonia son el escenario natural ideal para practicar arquería. Blancos montados sobre árboles, espacios abiertos, grandes extensiones de parque para disfrutar hacen de esta zona el lugar perfecto para probar su destreza con el arco y la flecha. La práctica de arquería en este increíble paisaje poblado de árboles y situado a orillas del río, le remontarán a las antiguas épocas en que el desafiante Robin Hood sorteaba las tupidas regiones del bosque de sherwood en busca de alimentos y bienes para los más necesitados.
Algunos clubs, hoteles y complejos deportivos de Calafate cuentan con predios especiales en donde se puede practicar el tiro con arco (denominación antigua, aún utilizada para referirse al deporte olímpico). Si bien no siempre la arquería se es practicada como deporte, en esta localidad sureña es muy elegida como actividad de ocio para distenderse luego de una estresante jornada o de una rutina intensa. El reciente predio de la Asociación de Tiro Lago Argentino ha integrado a sus actividades la práctica de esta disciplina. El complejo La Usina se encontrará un polígono específico para realizar estas actividades de ocio. El predio cuenta con blancos determinados para que los turistas puedan aprender a medir su puntería. En el espacio asignado se puede practicar dos disciplinas similares, comúnmente incluidas en el término “arquería”: ballesta o arco y flecha. La ballesta, al igual que el tiro al arco, consiste en disparar mediante un arco un elemento. La principal diferencia es que la ballesta dispara proyectiles (conocidos como pernos o virotes).
La arquería, también conocida como tiro al arco o arco y flecha, originariamente surgió como un instrumento de caza y como arma de defensa en los enfrentamientos bélicos. Las comunidades aborígenes se convirtieron en excelentes arqueros como método de caza para alimentar a la tribu. Con el paso del tiempo y el desarrollo de armamento de fuego para los conflictos bélicos, esta antigua arma quedó relegada y comenzó a utilizarse con fines de ocio y hasta deportivos.
La práctica de la arquería como deporte supone acertar con las flechas a un blanco predeterminado, asignando un puntaje según el área acertada. El deporte se practica dentro de un predio cerrado, en donde se han tomado todas las medidas de seguridad necesarias. El deporte, generalmente consiste en apuntar con la flecha había objetos aislados, considerados blancos, situados a distintas distancias desde el punto de tiro. La exactitud del tiro depende del conocimiento y manejo que cada uno tenga del equipamiento así como también de las habilidades de concentración y precisión.
Una práctica pasiva que no deja de ser un desafío para probar las destrezas personales. Una buena oportunidad para relajarse y entretenerse con esta antigua actividad. En La Usina encontrará el predio ideal para afinar su puntería y pasar una divertida jornada en el increíble paisaje.
