La Patagonia es una de las zonas del país que más concurrencia turística tiene en los últimos tiempos. Las bellezas naturales con que cuenta esta región, la convierten sin duda en una de las mejores alternativas para vivir unas vacaciones a pleno, ya sea junto a amigos o la familia. Estas bellezas, se pueden apreciar gracias a la mágica combinación de lagos, glaciares, montañas y bosques que podemos hallar en la misma. Cada una de estas riquezas invita, entusiasma y seduce a los miles de turistas de diferentes partes del mundo que cada año la eligen como destino.
Una de las localidades que permite apreciar acabadamente estos encantos patagónicos es El Chaltén. Esta localidad, que integra la provincia de Santa Cruz, cuenta con la particularidad de reunir en puntos próximos al pueblo una amplia diversidad de maravillas naturales, entre lo que se destaca su proximidad al Parque Nacional Los Glaciares así como el hecho de servir de ingreso al área de Hielos Continentales. Así, esta pequeña villa turística ofrece a quienes la visitan, la posibilidad de obtener las mejores postales de la región recorriendo a penas algunos kilómetros.
Una de las fotografías más exquisitas de obtener al visitar El Chaltén, es la del cielo chaltenense, ya que logra distinguirse vistosamente en contraste con el que se puede apreciar en otros lugares del país. El cielo de El Chaltén presenta intensos colores que varían a lo largo del día, dadas las cambiantes temperaturas de la región, el mismo se va adaptando gradualmente a las órdenes que emite nuestra madre naturaleza, pero de una manera muy especial y llamativa.
De este modo, en la diversidad y versatilidad que presenta esta zona, podremos hallar la posibilidad de contemplar las más sugestivas postales. Así, se podrá disfrutar de un cálido cielo veraniego, despejado, donde el sol es el protagonista principal del día gracias a su brillo intrínseco. Los lagos servirán de espejo para poder ver relucir este inmenso cielo durante el amanecer y, al caer la noche, lo podremos observar cubierto por estrellas que lograrán iluminar y guiar a los viajeros, en cada aventura. También podremos contemplar un arisco cielo de invierno que, en compañía de algunas nubes, harán relucir un intenso color azul, muy diferente al celeste cristalino del verano. El atardecer no se demora en llegar, los días se acortarán y la noche de invierno adquirirá total protagonismo.
El cielo de El Chaltén es especial porque el entorno en el que se puede observar también lo es. Tanto los bosques, como los glaciares, cerros y lagunas, hacen de este cielo patagónico una maravilla de la naturaleza que resulta muy llamativa para aquellos que lo visualizan por primera vez. La mezcla de colores que se puede observar al ver la cima de los cerros, el resplandor de los mantos de hielo, así como las aves más vistosas de la Patagonia sobrevolando sobre el mismo, hacen del cielo chaltenense un sublime espacio.
Así, si visitas esta zona del país, no pierdas la oportunidad de deleitar la mirada con cada una de los atractivos naturales que la Patagonia argentina tiene para ofrecer. Una experiencia única, tan única como la satisfacción de tomar este vital y encantador contacto con la naturaleza.
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