Documentos necesarios para viajar a Calafate

¿Que documentos necesito para visitar El Calafate? A la hora de planificar un viaje hacia cualquier destino es importante hacer una lista de los elementos que se necesitan llevar. En materia de documentación es de suma relevancia averiguar que papeles hay que tener para poder disfrutar de un viaje y excursiones sin inconvenientes.

 

Para visitar Calafate, puntualmente se requiere cierta documentación personal y papelería para poder ingresar a la provincia de Santa Cruz, así como también para poder realizar las excursiones a glaciares, o las visitas a los cerros y parques ubicados en territorio chileno. Aquellos que deseen visitar Calafate deben contar en forma indispensable con su Documento Nacional de Identidad, o en su defecto L.E, L.C o C.I. cualquiera sea, es útil es tanto documentación personal propia de cada país. Los turistas extranjeros deberán además presentar su correspondiente pasaporte y Seguro de Asistencia. El pasaporte, por lo general habilita a permanecer en territorio argentino por un plazo máximo de 90 días, pero ello deberá consultarse en la Embajada o dirección de migraciones correspondiente a su país de origen.

 

Otro aspecto importante a tener en cuenta son los menores, en caso de que ellos sean incluidos en la visita. De ser así lo recomendable es que los padres, responsables y/o tutores cuenten con la documentación perteneciente a los niños. En el caso de estar bajo la custodia de responsables y tutores, se debe contar además con la autorización de los progenitores con las firmas de autoridades policiales provinciales y de un escribano público. Más allá de quién custodie a los menores durante el viaje, se recomienda que estén permanentemente en compañía de un adulto, o bajo su vigilancia. Ello es imprescindible para poder realizar ciertas excursiones como las navegaciones por el Lago Argentino o las aventuras sobre los glaciares, ya que allí se solicitan los documentos de cada turista.

 

Para aquellas personas que deseen realizar este viaje en compañía de sus mascotas es importante conozcan la reglamentación sanitaria de cada provincia. Por lo general se permite el ingreso de los animales siempre y cuando sus respectivos dueños cuenten con la certificación de la vacunación correspondiente, otorgada por su veterinario y validado por el SE.NA.SA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria). Se recuerda que por precauciones sanitarias está prohibido transportar fruta y verduras por restricción sanitaria.

 

En el caso de que durante la visita tenga previsto cruzar hacia Chile, es importante considere llevar algunas documentaciones más ya que suelen ser solicitadas por los guardias de las fronteras. Se deberá llevar: libreta de casamiento, partida de nacimiento y pasaporte en caso de ser extranjero. Si se desea cruzar con niños, se recomienda nuevamente contar con la documentación de los menores y sus autorizaciones correspondientes.

 

Por último, en caso de trasladarse hacia la ciudad de Calafate, se aconseja contar con la documentación correspondiente al mismo. Algunos de los más solicitados por la policía y/o controles de tránsito son: cédula verde, carnet de conducir, seguro de cobertura y DNI.

 

Estos son los principales documentos que deben reunirse a la hora de planificar un viaje a Calafate. Se recomienda contar con todos ellos, para garantizar una tranquila estadía en la sureña localidad y para poder realizar cualquier excursión sin ningún tipo de restricción.

Como disfrutar del ocio en Calafate

Luego de algunos días de intensa actividad turística en las inmediaciones de Calafate, o de largas jornadas de encuentros y convenciones de negocios, de seguro buscará un lugar, una actividad, un entorno que le permita recrear y disfrutar del ocio. Afortunadamente esta localidad sureña cuenta con innumerables opciones entre las que podrá elegir para relajarse y complacerse a sí mismo con entretenidas actividades y alternativas.

 

Uno de los sitios ideales para dedicarse al ocio es el complejo de La Usina, situado a 40 kilómetros de Calafate. En este increíble refugio de montaña encontrará una propuesta recreativa única. El predio cuenta con un restaurante de campo en donde podrá relajarse y deleitarse con los mejores platos de la cocina patagónica. Allí podrá disfrutar de exquisitas meriendas, almuerzo y cenas. Luego de saborear las deliciosas preparaciones, se puede optar por tomar un descanso en cómodas reposeras sobre un deck de madera, ubicado a modo de balcón sobre las aguas del Río Mitre. Desde allí se puede apreciar la belleza de los cerros que rodean a la estancia y de los ejemplares de lengas que componen el frondoso bosque. Quienes deseen continuar con las actividades y excursiones podrá participar de las cabalgatas, paseos en mountain bike y practicar arquería en el predio de La Usina.

 

Por sus técnicas y características, la pesca deportiva es una de las actividades de ocio más elegidas por los turistas que buscan esparcimiento. Es la excusa perfecta para sumergirse en un profundo contacto con la naturaleza y dejarse cautivar por su perfección y quietud. En proximidades de Calafate, podrá practicar la pesca en ríos y lagos de la zona, en busca de ejemplares únicos como la trucha, el salmón, el dorado, entre otros. Una de las técnicas más frecuente en la región es la pesca con mosca, modalidad que permite mediante la utilización del cebo, capturar truchas. La pesca es una interesante actividad recreativa que le permite apreciar el paisaje natural y a la vez impregnarse de la tranquilidad y calma que la misma práctica supone.

 

Para aquellos que disfrutan del entretenimiento nocturno, El Calafate cuenta con variados bares y pubs en donde podrá satisfacer sus deseos de ocio. Entre esta diversa oferta encontrará bares musicales en donde se puede deleitar con exquisitos tragos y presenciar shows musicales, bares y cafés literarios que combinan la poesía y la literatura con lo mejor de las cafeterías patagónicas, bares culturales en donde se puede apreciar y participar de talleres, presentaciones y actividades culturales. En dichos sitios es frecuente la presentación de monólogos teatrales, recreación de interpretaciones artísticas y composiciones musicales. Además, encontrará tradicionales bares y boliches en donde podrá bailar al compás de la música.

 

Para todos los gustos, edades y preferencias, Calafate tiene una opción. Contacto con la naturaleza, esparcimiento, actividad nocturna, son algunas de las opciones más elegidas por los turistas. El ocio ocupa un lugar privilegiado en la propuesta de Calafate; se busca brindar la mejor respuesta a las demandas de los visitantes y satisfacer sus deseos.

Punta Bonita: sitio arqueológico

El Calafate es un completo destino que ofrece las más variadas opciones para que pueda realizar todo tipo de actividades durante su estadía. Esta propuesta no sólo se refiere al turismo aventura, a las excursiones y paseos, o al turismo de reuniones y convenciones. También podrá encontrar en esta mágica localidad austral, una tentadora oferta para el turismo arqueológico.

 

Punta Bonita es un reconocido sitio arqueológico ubicado en proximidades de Calafate. Es un yacimiento en donde se hallaron las primeras pinturas y expresiones rupestres de Santa Cruz. Su valor arqueológico, combinado con la belleza del paisaje natural que la rodea, hace de Punta Bonita un punto increíble que no se puede dejar de visitar durante la estadía en Calafate.

 

En este sitio se hallaron pinturas y grabados rupestres cuya antigüedad se estima ronda los 4000 y 8000 años. Los hallazgos, según los historiadores y arqueólogos, corresponderían a comunidades y tribus anteriores a los techuelches. Las formas, técnicas y colores utilizados pertenecerían a los hombres del Paleolítico. Las pinturas rupestres halladas remiten a la forma de vida que habrían llevado estas comunidades; grabados que refieren la caza de animales, la adoración a deidades, y hasta autorretratos que revelan la concepción que tenían de sí mismos y del mundo. Algunos grabados ilustran el entorno natural que existía en aquel momento (animales, árboles, montañas y ríos, etc). Estas pinturas habrían sido logradas utilizando los dedos o matas de pelo como pinceles para dibujar. Por sus formas y contornos se puede estimar que muchas fueron hechas utilizando huesos de guanaco ahuecados, por el cuál los sujetos soplaban las tintas. Sirviéndose de tintas naturales, grasa de guanaco, resina y yeso, hacían los grabados sobre las superficies de las rocas, al interior de cuevas y bóvedas. Además de las pinturas y grabados, los exploradores hallaron en el lugar elementos como proyectiles, puntas de flechas, algunas vasijas.

 

Para recorrer este importante circuito histórico, se puede transitar por diversos senderos interpretativos que ayudan a los turistas a informarse y apreciar el gran valor histórico de estos hallazgos. Estos senderos señalizados facilitan la comprensión de los grabados y pinturas que se observan durante el recorrido. Existen dos grupos de senderos; de reproducción (en donde predominan las imitaciones de los motivos y formas halladas) y el de zona arqueológica donde se conservan las pinturas intactas.

 

 Junto a las Cuevas de Walichu, estos yacimientos arqueológicos son los más importantes de la provincia ya que allí se encontraron las primeras pinturas rupestres. Son un componente clave de la reconstrucción histórica de la Patagonia, conservado en perfectas condiciones a pesar de los años.

 

La visita a estas cuevas y ruinas es una actividad ideal para hacer en familia, para acercarse a la historia de la Argentina. Es una entretenida forma de sumergirse en la cultura y forma de vida de los antiguos pobladores de la región y conocer los legados que dejaron para las generaciones venideras. Inmerso en un paisaje maravilloso, el yacimiento de Punta Bonita invita a dar este paseo cultural y encontrarse con las raíces de la historia, y contactarse con la naturaleza a sólo metros de Calafate.

Casas históricas en el Calafate

Calafate es mucho más que glaciares. Su propuesta turística conjuga paseos históricos, eventos culturales, además de las aventuras por las congeladas superficies de los bloques de hielo. Una de las ofertas más interesantes que Calafate tiene para sus turistas el circuito por las casas históricas de la localidad. Ricos en años como en historias, estos auténticos monumentos datan de comienzos de siglo XX y han permanecido a pesar del paso del tiempo.

 

La casa más antigua del pueblo es uno de los puntos históricos más visitados. La misma se ubica a sólo unos metros de Av. Del Libertador, sobre calle 15 de Febrero. Su construcción fue realizada en el año 1908, con adobe y ladrillos. Pertenecía a la Estancia Anita y era el hogar de los hermanos Carmen y Regimio Ortiz, unos entrerrianos que llegaron a suelo santacruceño para dedicarse a la cría de ganado y doma de caballos. Al poco tiempo fue deshabitada, pero fue conservada como “La primer casa del Pueblo”.

 

El “Establecimiento La Anónima” es otro monumento histórico ubicado en inmediaciones de la localidad de Calafate. Inicialmente estuvo situado en el Paso Charles Fuhr, pero luego de las huelgas y revueltas allá por 1921, de decidió trasladarlo a Calafate.

 

En el año 1924 se realizó el traslado completo hacia la ciudad, mediante caballos y carretas. Unos doce años después se instala allí la Estafeta Postal y Terminal Telefónica de Calafate. Otra antigua construcción para visitar es la “Escuela N°9”, construida allá por 1927 al igual que el Juzgado de Paz (otra edificación histórica), gracias al esfuerzo y aporte de los vecinos de la zona. Tres años después de su construcción, el establecimiento se oficializa como la Escuela Nacional N°9 de Calafate, con un total de 26 alumnos concurrentes (distribuidos en 4 cursos). Su funcionamiento como edificio de la institución se mantuvo hasta el año 1973, fecha en que se construyen nuevas instalaciones, en el mismo predio, a las cuáles se traslado finalmente el colegio. Por lo tanto el edificio pasó a formar parte del “Jardín de Infantes Gral. Martin Miguel de Güemes”. Algunos años después el mismo jardín demandó la construcción de una edificación más grande, debido al creciente aumento de alumnos, por lo que nuevamente las antiguas instalaciones se vieron abandonadas. En el año 1986 fue abierto como “Escuela entre Adultos N° 11”, que aún permanece, y unos 20 años después se instaló también el “Centro Tecnológico Comunitario”. Cada rincón de este antiguo edificio guarda los secretos de más de 100 alumnos que por allí pasaron. Una verdadera joya arquitectónica e histórica.

 

Allá por el año 1940 comienza a levantarse en Calafate una pequeña vivienda con ladrillos, adobe y tortas de barro. Era simplemente la vivienda particular de un ciudadano de la localidad. Allí vivió durante varios el propietario. Al fallecer el mismo y no encontrar ningún heredero o familiar, el predio quedó en manos del estado. En el año 1984 por ordenanza Municipal se lo declara Museo Regional del Calafate, con el objetivo de” reunir, conservar, exponer , difundir, investigar y custodiar todo lo que concierne al Patrimonio Cultural y Natural de la Región”. Otra edificación histórica de El Calafate es la Intendencia del Parque Nacional Los Glaciares. La comenzó en el año 1943 y culminaron tres años después. La estructura, de madera, se ha conservado intacta. La intendencia del Parque fue sinónimo de crecimiento para la zona ya que fue responsable de muchas políticas ambientales y forestales, de la construcción de puentes, de la provisión de la energía eléctrica, y de muchos eventos sociales y culturales. Todo este desarrollo sin duda fue un gran empujón para el turismo en Calafate. El predio de la intendencia cuenta con el Centro de Informes, el Centro de Capacitación para formar guías y dos viviendas anexas para los guardaparques.

Origen del Paraje El Calafate

El territorio actual de El Calafate antiguamente era paso obligado de quienes buscaban trasladar mercadería o animales hacia localidades el sur. Los largos trechos que debían recorrerse por los caminos patagónicos eran demasiada exigencia para los bueyes que tiraban las carretas, por lo que comenzaron a surgir los paradores. Generalmente estos puntos de descanso se ubicaban cada tres leguas (aproximadamente 12 kilómetros), ya que se consideraba que era la distancia apta para una jornada en carreta. Estos paradores solían situarse en proximidades de arroyos, ríos o lagunas y en puntos protegidos del viento por montes, barrancos o piedras, de modo que se constituían en verdaderos puntos de descanso en donde resguardarse del clima.

 

En proximidades de donde actualmente se ubica la localidad, se ubicaba uno de esos paradores de viaje. El mismo presentaba una peculiaridad, no observada en otros puntos de detención, estaba rodeado de un gran arbusto, al cuál inicialmente los carreros denominaron “mata grande”. Dicho arbusto era la planta de calafate, por lo que tiempo después bautizaron al paraje con el nombre de esta especie vegetal “calafate”. Posteriormente comenzó a denominárselo “El Calafate”.

 

El paraje El Calafate era visitado por numerosos viajeros que recorrían los áridos y solitarios caminos de la Patagonia. A principios de siglo, un comerciante decidió montar en dicho punto, un rancho de adobe. Armando Guillón, responsable de dicha construcción, habitó allí hasta el año 1913 aproximadamente, fecha en que tomó sus pertenencias y se retiró hacia otro rumbo. Pero el rancho no permaneció deshabitado mucho tiempo, en breves fue ocupado por inmigrantes españoles. Dos familias oriundas de La Coruña, Pantín y Freile, adquirieron la construcción e instalaron allí un hospedaje y almacén de ramos generales. Con este desarrollo esta antigua posta comenzaba a convertirse en el asentamiento de El Calafate.

 

A medida que este lugar comenzaba a poblarse, surgió la necesidad de organizar este nuevo asentamiento. Producto de estas necesidades el Gobierno Nacional decretó en 1927 la creación del pueblo de El Calafate. La en ese entonces, dirección nacional de tierras, dispuso trazar el ejido urbano en un valle, a orillas del arroyo Calafate, al sur del Río Santa Cruz, sobre el Lago Argentino. A pesar de la iniciativa de los pobladores de formar el pueblo sobre la llanura alta, para aprovechar el suelo de la quebrada para actividades agrícolas, Calafate terminó formándose en la zona baja. De a poco fue desarrollándose y montándose la estructura del, por aquellos años, pueblo de El Calafate. Debido a que su población no superaba los 500 habitantes, la comuna estaba al mando del Juez de Paz local (establecido por el Régimen Municipal de Territorios Nacionales). Recién en el año 1946, la localidad logró obtener su propio órgano de conducción con la creación de la Comisión de Fomento del Lago Argentino (por resolución del Gobierno Provincial).

 

Durante la década del 70, se determina por resolución oficial, que el crecimiento de El Calafate debía ser organizado en base a un ordenamiento urbanístico estipulado para localidades de 25.000 habitantes. El incipiente desarrollo y crecimiento de la zona se vio reflejado en decretos como el nombrado y en el paso de Comisión de Fomento a Municipio como instancia de gobierno. En el año 1973 el decreto provincial habilita al Municipio a ejercer como forma de gobierno y en diciembre de ese mismo año el Concejo Deliberante, sesiona por primera vez.

Para las caminatas y campamentos por el Calafate se recomienda

Calafate ofrece muchas excursiones y aventuras de caminatas a puntos míticos de la región. Desde paseos trekking a sitios como Lago Roca, la Reserva Natural de Laguna Nimez, hasta la caminata sobre el Glaciar Perito Moreno. Es importante tener en cuenta que para realizar estas excursiones se debe contar con una vestimenta que permita ejecutar la actividad con facilidad.

 

Para quienes deseen realizar alguna excursión de trekking recomendamos contar con el equipamiento e indumentaria adecuada para facilitar la caminata y permitirle disfrutar de los paisajes y las vistas. Respecto de la vestimenta personal se aconseja utilizar calzado apto para trekking (no zapatillas de lona, ni deportivas), preferentemente impermeables para evitar inconvenientes durante eventuales lluvias o caminatas sobre la nieve. Se recomienda vestir utilizando la técnica de “capas de la cebollas”; ello implica colocarse varias prendas de modo que pueda quitarse alguna al ingresar en ambientes calefaccionados, y protegerse al permanecer en la intemperie. Lo ideal es colocarse en una primera “capa” una prenda interior que permita la rápida evapotranspiración y secado, actualmente se pueden adquirir remeras y camisetas térmicas, aptas para utilizar bajo las demás prendas. La segunda capa debe ser una prenda de abrigo, si es de polar, mejor. Por último se debe colocar por encima una campera rompevientos impermeable. Respecto de los accesorios se aconseja contar con lentes de sol con filtro UV, protector solar con factor superior a 20, gorra o sombrero para protegerse del sol y durante el invierno bufandas y guantes. El equipamiento básico para una caminata simple debe incluir una mochila en donde llevar otro abrigo, la campera impermeable, un par de medias de algodón (para cambiarse en caso de que el agua o la nieve penetre el calzado y moje el par usado), un box-lunch con algo para alimentarse, una cantimplora con agua mineral, una bolsa de nilon para guardar posibles residuos, y papel de carilina. Los principales consejos para quienes realicen caminatas son: respetar los senderos, no intentar acortar caminos, respetar la flora autóctona y no cortar flores, no arrojar residuos, no alimentar a ningún animal que se aproxime, en caso de ser caminatas autoguiadas contar con un mapa u orientación propia. En el caso de participar de la excursión junto a un grupo se debe respetar las indicaciones del guía y no apartarse del grupo.

 

Una alternativa ofrecida por muchas agencias de turismo de Calafate es la excursión de caminata y campamento, sobre todo en las aventuras a los Cerros como Fitz Roy en Chaltén, Torre, entre otros. Para este tipo de actividades se recomienda contar con la indumentaria ya especificada, haciendo hincapié en las prendas impermeables debido a que durante el período Octubre- Marzo, son frecuentes las nevadas durante la madrugada en la región austral. Por ello es que se aconseja contar con carpas impermeables (aptas para acampar en la nieve), y con bolsas de dormir reforzadas, que conservan la temperatura corporal, además de prendas de abrigo. Durante su permanencia en el campamento, es recomendable evitar dejar alimentos al alcance de los animales, mantener limpio el predio en donde se acampa, no hacer fuego bajo ninguna circunstancia (la flora de los Parques Nacionales esta protegida), respetar las reglas del campamento, no arrojar restos de comida ni lavar vajilla en los ríos o lagos. No se debe separar del grupo y se debe consultar al guía antes de apartarse del campamento.

 

Estas son algunas de las recomendaciones que se deben tener en cuenta a la hora de pensar en realizar una excursión de esta índole. Si las excursiones se llevarán a cabo en compañía de un grupo, previa contratación de una agencia, los guías o acompañantes le indicarán todo el equipamiento necesario y le avisarán en caso de necesitar prendas o equipos especiales.

Acceso por vía terrestre a Bariloche

San Carlos de Bariloche es una ciudad perteneciente a la provincia de Río Negro ubicada en la República Argentina.

 

Los accesos por vía terrestre a Bariloche son varios y se puede acceder ya sea en vehículo particular o bien a través de las líneas de colectivos de larga distancia que viajan al sur.

 

Cuenta con una importante terminal de ómnibus donde a diario llegan micros desde diferentes puntos de Argentina y países limítrofes.

 

Como información útil, esta ciudad andina se encuentra ubicada al sudoeste del Parque Nacional Nahuel Huapi, limita también con la imponente Cordillera de los Andes y se ubica a 832 Km de la ciudad de Viedma.

 

Si desea emprender el viaje en auto y si se encuentra en capital federal puede acceder a través de la ruta nacional número cinco hasta la ciudad de Santa Rosa precisamente La Pampa, allí se empalma con la ruta 35 para luego tomar la 152 y más tarde empalmar con la ruta provincial nº 20, luego y nuevamente se toma la ruta nacional 22 hasta llegar a Neuquén. De allí solo quedan unos kilómetros para llegar a Bariloche.

 

La otra opción es tomarse un micro casi todos los puntos del país. Córdoba, Buenos Aires, Mendoza y Salta son algunas de las provincias que cuentan con viajes directos a Bariloche. Los colectivos cuentan con servicio regulares todos los días y se anexan unidades adicionales los fines de semana largos o en plena temporada de nieve.

 

Hay diferentes micros que ofrecen distintas comodidades, el semicama es el servicio más básico y económico sus butacas son cómodas y no brinda ningún adicional.

 

Si se dispone de un poco más de dinero una opción distinta es el coche cama o con servicio premium como algunas empresas lo denominan.

 

El asiento se asemeja a una cama como su nombre lo indica, es más ancho y hay más espacio entre una y otra butaca.

 

Por lo general en este tipo de servicio se brinda algún refrigerio que suele incluir algún sándwich, galletas y barras de cereal, además de contar con jugo, whisky y café durante todo el viaje.

 

Por último la clase ejecutiva y la más cara de todas. El servicio está a cargo de azafatas e incluye cena y en muchas ocasiones hasta el desayuno incluido. El precio varía en cuanto a las comodidades y tipos de coche. La mayoría de las empresas recibe tarjetas de crédito y por supuesto pagos en efectivo.

 

Las líneas de colectivos de larga distancia que ofrecen estos servicios son muchas y atraviesan varias ciudades, las opciones son: Chevalier, Cruz del Sur, Flecha Bus, Vía Bariloche y Andesmar.

 

Todas estas empresas son de muy buen nivel, con unidades totalmente equipadas y con los controles técnicos y mecánicos en orden.

 

Otra de las opciones y quizás menos conocida es el acceso en tren, pero solo desde la ciudad de Río Negro.

 

Viajar a Bariloche es muy simple y práctico, cuenta con empresas y hasta un tren que trasladara a usted y sus seres queridos a un destino único y maravilloso.

 

Dentro de la ciudad si no se cuenta con auto no es problema, hay tres líneas de colectivos que comunican los diferentes puntos y servicio de remises las 24 horas a disposición de los turistas.